Entradas

Mostrando entradas de 2017

SJÓN

Imagen
EL ZORRO ÁRTICO SJÓN (Traducción Enrique Bernárdez) Nórdica Libros, Madrid, 2008 El subtítulo de esta novela es “Leyenda popular”. Y en ella encontramos muchos elementos característicos de este género islandés, que acompaña inseparablemente al de los “cuentos”. Las leyendas suelen explicar el origen de algo o alguien, aunque muchas veces resultan difíciles de distinguir de los cuentos propiamente dichos, pues se limitan a contar historias, si bien siempre se les quiere dar una cierta apariencia de historia real. Un personaje típico de las leyendas y los cuentos islandeses es el cura rural, que suele poseer enorme fuerza física y ser un destacado maestro en los debates teológicos. Otro personaje de gran importancia en el folklore islandés es el zorro, el único depredador de la isla y el único mamífero que habitaba esas tierras antes de la colonización nórdica de finales del siglo IX. Típica es también la mezcla de lo maravilloso y lo realista, que no se queda e

CUENTOS DE ESCALDO: de Borges a Vikings

Imagen
La obra que a continuación reseñamos se enmarca dentro de un proyecto literario del autor, consistente en la elaboración de una narrativa histórica respetuosa con la Historia Nórdica y la importante traducción literaria de las Sagas Islandesas. Como lectora, no sólo agradezco haberlo pasado bien. Que lo hice. Sino además, aprender. Que lo hice mucho. Y con respecto a la cultura escandinava, sólo tengo un antecedente que me lleva a la misma experiencia… y es mi querido Jorge Luis Borges. Para aprender , en estos cuentos que más que cuentan, se cantan, encontraremos a cierto rey Athelstan , que es otro, y otra será su historia; a dos Hermanos Cuervo como protagonistas, acaso mis favoritos ya que “los cuervos son animales de gran simbolismo en el imaginario nórdico. Odín, el dios supremo, los utiliza como espías, son representados en numerosos estandartes, simbolizan clanes familiares… Están muy relacionados con las batallas, son las aves carroñeras del norte. Como

SELMA LAGERLÖF 20 de noviembre de 1858

Imagen
La sueca Selma Lagerlöf nació en el año 1858 y hasta el principio de la década de los noventa no empezó a destacar literariamente. Con su primera obra "Gösta Berling", la escritora se hizo famosa en Suecia y pronto en todo el mundo. Aquella primera obra ya era perfecta, contenía todo lo esencial del talento de Lagerlöf; la escritora se revelaba como una personalidad hecha y madura y desde entonces ha permanecido invariable en todos sus rasgos. Quien ante lo bello sienta también la necesidad de criticar, podrá encontrar en esto la limitación de su talento. En Selma Lagerlöf no vivimos el espectáculo de una evolución, sus obras aparecen como hermanas y aparentemente coetáneas, no separadas por ningún abismo. Quizás sea este el rasgo femenino de su talento: un descansar en sí misma casi inmóvil, un echar raíces y agarrarse, un ser y crecer sin disonancias ni sobresaltos. El que quiera puede deducir de esta falta (aparente o real) de conflicto, de lucha y evolución, que S

A Whitman KARIN BOYE

Imagen
En su antología Härdarna (Los Hornos) Karin Boye presenta algunos poemas a través de los cuales se expresa la voz de filósofos y poetas famosos (Nietzche, Kipling, Whitman...). A continuación el correspondiente a Whitman: EL FUNDAMENTO DE TODA METAFÍSICA Y ahora, señores, les diré unas palabras para fijar en los pensamientos y en la memoria como fundamento y también como cima de toda nuestra metafísica. (Así dijo a los estudiantes el viejo profesor, oído por muchos, al final del curso). Hemos leído sobre lo nuevo y sobre lo viejo, los sistemas helénico y germánico, a Kant hemos leído y analizado, y a Fichte y a Schelling y a Hegel, hemos leído sobre las lecciones de Platón y de Sócrates, más grande que Platón, y largamente hemos leído sobre Cristo, el esplendoroso, más grande que Sócrates – esto está investigado y puesto en claro. Hoy vuelvo a mirar los sistemas helénico y germánico, veo a todos los filósofos, veo las iglesias cristianas y las sectas. Pero

Poesía sueca VIII

Imagen
Cómo puedo saber si tu voz es hermosa. Sólo sé, que me penetra y me hace temblar como una hoja y me desgarra en pedazos y me divide. Qué sé yo de la piel y de las extremidades. Las haces temblar como si fueran tuyas, y no hay para mí ningún descanso ni sueño, hasta que dejas que vuelvan a ser mías. KARIN BOYE

Poesía sueca VII

Imagen
Si pudiera seguirte muy lejos, más allá de todo lo que conoces, fuera, en la soledad del mundo, en las regiones más remotas donde la Vía Láctea haga girar una brillante espuma muerta y donde busques un refugio en el espacio vertiginoso... Lo sé: no se puede. Pero cuando te levantes tiritando, ciego, como en tu bautismo, a través de todo el espacio escucharé tu llamada, y seré para ti nuevo calor, seré para ti nuevo abrazo, y estaré cerca de ti en ese otro mundo, entre cosas con nombres aún no nacidos. KARIN BOYE

EL ECLIPSE DE SOL

Imagen
Eran Stina, de la Montaña de los pastizales; Lina, de la granja de los Pájaros; Kaisa, del Pantanito; Maya, de la Gran Altura; Beda, de las Tinieblas Finlandesas; Elin, la joven que habitaba la antigua casa del soldado, y tres o cuatro mujeres más. Vivían en el más apartado extremos del concejo, al pie de la Gran Altura, en una comarca tan pedregosa y tan poco fértil, que ningún gran propietario del país había tenido intención nunca de apropiarse. La casa de una de ellas estaba edificada en una meseta desnuda de la montaña, en la roca misma; la de otra se alzaba a la orilla de una turbera; una tercera habitaba en lo alto de una colina, tan escarpada, que se cortaba la respiración para subir a ella. Y si, como cosa extraordinaria, una de ellas poseía un terreno menos estéril para el emplazamiento de su cabaña, que la montaña dominaba, era tal que no veía el sol desde la feria de otoño hasta el día de la Anunciación. Todas habían roturado un trocito de campo, cerca de su c

LA PRINCESA DE BABILONIA

Imagen
Noche oscura de invierno, en la chocita de Skrolycka. Catalina está hilando en el torno, y el gato acurrucado en sus rodillas, ronronea. El marido, Juan Andersson, se calienta la espalda en la chimenea. Ha trabajado como leñador todo el día en el bosque de Erik, en Falla. No se podía, equitativamente, pedirle que se pusiese a trabajar cuando ha regresado. La misma Catalina encontraba natural que se distrajera con su hijita, que aquel invierno cumpliría los cinco años. Catalina sumida en sus pensamientos, oía sin prestar demasiada atención, la charla de ambos. En general, los vigilaba, porque no quería que Juan dijera a su pequeña que era linda, inteligente y maravillosa, que con enfadosa frecuencia, solía hacerlo. Porque si Clara Aurelia desde la infancia, comenzaba a creérselo, Catalina sabía muy bien que nunca llegaría a ser una mujer como Dios manda. Juan era incorregible. ¿Qué no inventaba para despertar la imaginación en la pequeña? Pero aquella noche Catalina

EL MATÓN QUE SOÑABA CON UN LUGAR EN EL PARAÍSO

Imagen
EL MATÓN QUE SOÑABA CON UN LUGAR EN EL PARAÍSO JONAS JONASSON Editorial Salamandra, Barcelona, 2015 Per Persson pensó que bien podría perder un par de minutos con la pastora, ya que se había dignado a interesarse por él. Así que le habló del abuelo, que había dilapidado su fortuna. De su padre, que había tirado la toalla. De su madre, que se había liado con un banquero islandés y había abandonado el país. De cómo él mismo había acabado, con tan sólo dieciséis años, en una casa de putas. Y de cómo ahora trabajaba de recepcionista en la pensión en la que se había convertido la casa de putas. Y cuando por fin tengo veinte minutos libres y me siento en un banco a una distancia prudencial de los mangantes y golfos con que suelo tratar en el trabajo, entonces aparece una pastora que no cree en dios, que primero intenta estafarme el poco dinero que tengo y después me gorronea el almuerzo. Ésa es mi vida, a no ser que cuando vuelva, gracias a su oración, la vieja casa de putas se

Poesía sueca VI

Imagen
Estoy enferma de veneno. Estoy enferma de una sed para la que la naturaleza no ha creado ningún remedio. De todos los campos brotan arroyos y manantiales. Me inclino y bebo su sacramento de las venas de la tierra. Y los cielos se desbordan en ríos sagrados. Me levanto y siento mis labios húmedos de éxtasis blancos. Pero en ninguna parte, en ninguna parte… Estoy enferma de veneno. Estoy enferma de una sed para la que la naturaleza no ha creado ningún remedio. KARIN BOYE Traducción de Mar Hortelano

Poesía sueca V

Imagen
El profundo violonchelo de la noche Lanza el oscuro regocijo a través de los campos. Las vagas imágenes de las cosas Disuelven su forma en torrentes de luz cósmica. Marejadas brillantes y largas Enjuagan ola tras ola a través de la eternidad azul noche. ¡tú! ¡tú! ¡tú! Materia ligera revelada, Espuma floreciente del ritmo, Flotante y vertiginoso sueño de sueños, ¡blanco deslumbrante! Una gaviota soy, y en alas Extendidas en reposo Bebo la dicha de sal marina Muy al este de todo lo que sé, Muy al oeste de todo lo que quiero, Y toco el corazón del mundo; ¡blanco deslumbrante! KARIN BOYE

SINUHÉ EL EGIPCIO

Imagen
SINUHÉ EL EGIPCIO MIKA WALTARI (Trad. Manuel Bosch Barrett) Ed. Círculo de Lectores, Barcelona, 1981 Yo, Sinuhé, hijo de Senmut y de su esposa Kipa, he escrito este libro. No para cantar las alabanzas de los dioses del país de Kemi, porque estoy cansado de los dioses. No para alabar a los faraones, porque estoy cansado de sus actos. Escribo para mí solo. No para halagar a los dioses, no para halagar a los reyes, ni por medio del porvenir ni por esperanza. Porque durante mi vida he sufrido tantas pruebas y pérdidas que el vano temor no puede atormentarme y cansado estoy de la esperanza en la inmortalidad como lo estoy de los dioses y de los reyes. Es, pues, para mí solo para quien escribo, y sobre este punto creo diferenciarme de todos los escritores pasados o futuros. Porque todo lo que se ha escrito hasta ahora lo fue para los dioses o para los hombres. Y sitúo entonces a los faraones también entre los hombres porque son nuestros semejantes en el odio y

EL CAMPEÓN DE TENIS

Imagen
EL CAMPEÓN DE TENIS KASPAR COLLING NIELSEN (Trad. Blanca Ortiz) Pese a su edad avanzada, Stig Andersen seguía siendo un ambicioso tenista aficionado. A los dieciocho años había disputado el campeonato nacional de Dinamarca –que, sin embargo, ni entonces ni después llegó a ganar- y ahora, a los cuarenta y dos años, era el campeón del Club de Tenis de Rødovre por vigésimo año consecutivo, sin contar con la edición anterior, en la que perdió ante Axel Schandorf, a la sazón un jovencito de solo diecinueve años. Cuando ni jugaba al tenis era maestro. Estaba casado con Marianne y tenían una hija, de catorce años. Era verano y faltaban escasas semanas para el torneo anual del club. El Club de Tenis de Rødovre, un pequeño oasis verde rodeado de un seto de haya tupido e impenetrable, se encontraba a pocos kilómetros del monte Copenhague. Traspasar el portón de entrada, artísticamente tallado en el seto, y penetrar en la craquelada sombra azul que proyectaban sus h